Atendemos a más de dos sobrevivientes de violencia sexual cada hora en República Democrática del Congo

En un informe retrospectivo publicado el 30 de septiembre, Médicos Sin Fronteras (MSF) anunciamos que, junto con el Ministerio de Salud, hemos tratado a un número sin precedentes de víctimas y sobrevivientes de violencia sexual en la República Democrática del Congo en 2023.

Esta tendencia al alza continuó en los primeros meses de 2024. Es por eso que desde MSF llamamos a todas las partes interesadas, nacionales e internacionales, para que tomen medidas urgentes para prevenir este fenómeno y mejorar la atención a las sobrevivientes.  

En 2023, los equipos de MSF en la República Democrática del Congo (RDC) ayudamos a tratar a 25,166 víctimas y sobrevivientes de violencia sexual en todo el país. Es decir, más de 2 cada hora.  

Esta cifra es, por mucho, la cifra más alta jamás registrada por MSF en la RDC, basada en datos de 17 proyectos establecidos por MSF en apoyo del Ministerio de Salud en cinco provincias congoleñas: Kivu Norte, Kivu Sur, Ituri, Maniema y Kasai Central. En años anteriores (2020, 2021, 2022), los equipos de MSF tratamos a un promedio de 10,000 víctimas al año en el país. Por lo tanto, el año 2023 marca un aumento masivo de las entradas.   

La tendencia se aceleró en los primeros meses de 2024. Solo en la provincia de Kivu Norte, 17,363 víctimas y sobrevivientes fueron atendidas con ayuda de MSF entre enero y mayo. Ni siquiera a mitad de año, esto ya representaba el 69% del total de víctimas atendidas en 2023 en las cinco provincias mencionadas anteriormente. 

Las mujeres desplazadas son las primeras víctimas de violencia sexual

Analizados y verificados a lo largo de varios meses, los datos de atención de 2023 presentados en el informe ‘Pedimos ayuda’ muestran que el 91% de las sobrevivientes tratadas con la asistencia de MSF en RDC fueron admitidas en la provincia de Kivu Norte. Allí, los enfrentamientos entre el grupo M23, el ejército congoleño y sus respectivos aliados se han prolongado desde finales de 2021, obligando a cientos de miles de civiles a huir. 

La mayoría de las sobrevivientes (17,829) fueron atendidas en los asentamientos de desplazados en los alrededores de Goma. Estos campos siguieron creciendo a lo largo de 2023.   

“Según los testimonios de nuestras pacientes, dos tercios de ellas fueron atacadas a punta de pistola”, dijo Christopher Mambula, jefe de programas de MSF en la RDC. “Estos ataques tuvieron lugar en los propios sitios, pero también en los alrededores, cuando las mujeres y las niñas, que representaron el 98% de las sobrevivientes tratadas por MSF en la RDC en 2023, salieron a recoger madera o agua, o a trabajar en el campo”.  

La violencia sexual en la República Democrática del Congo es una emergencia médica

Si bien la presencia masiva de hombres armados en los lugares de desplazamiento y sus alrededores explica esta explosión de violencia sexual, la insuficiencia de la respuesta humanitaria y las condiciones de vida inhumanas en estos sitios alimentan el fenómeno. La falta de alimentos, agua y actividades generadoras de ingresos agrava la vulnerabilidad de las mujeres y las niñas (1 de cada 10 sobrevivientes tratadas por MSF en 2023 eran menores de edad), que se ven obligadas a ir a las colinas y campos vecinos donde hay muchos hombres armados. La falta de saneamiento y de refugio seguro para las mujeres y las niñas las hace vulnerables a los ataques. Otras son víctimas de explotación sexual para mantener a sus familias.  

“En realidad, parece haber muchos programas para prevenir y responder a las necesidades de las víctimas de violencia sexual. Pero sobre el terreno, en los lugares de desplazados, nuestros equipos luchan cada día para derivar a las sobrevivientes que necesitan ayuda”, afirma Christopher Mambula.

Los pocos programas que existen son siempre demasiado efímeros y carecen de recursos suficientes. Se necesita mucho más para proteger a las mujeres y satisfacer las necesidades urgentes de las sobrevivientes. 

Llamados urgentes a la acción  

Sobre la base de las necesidades expresadas por las sobrevivientes de violencia sexual, y sobre la base del trabajo previo para resolver este problema de largo registro en el país, el informe que presentamos enumera unas 20 acciones urgentes que deben tomar las partes en el conflicto, las autoridades congoleñas (nacionales, provinciales y locales), así como los donantes internacionales y el sector humanitario.

Para MSF, hay tres áreas principales de acción urgente

1. Desde Médicos Sin Fronteras llamamos a todas las partes en el conflicto a garantizar el respeto del derecho internacional humanitario. En particular, pedimos la prohibición absoluta de los actos de violencia sexual, pero también el respeto de la naturaleza civil de los lugares de desplazamiento. La protección de la población civil atrapada en los combates debe ser una prioridad. El llamado para proteger a los civiles de los abusos también se dirige a quienes participan en programas humanitarios.  
2. Llamamos a mejorar las condiciones de vida en los asentamientos de personas internamente desplazadas. Es decir, hay que mejorar el acceso a las necesidades básicas (alimentos, agua, actividades generadoras de ingresos). Así como a un saneamiento y una vivienda seguros y bien iluminados. Estas inversiones también deben ir acompañadas de mayores esfuerzos para crear conciencia sobre la violencia sexual. Si bien la financiación humanitaria debe ser lo suficientemente flexible como para responder a las necesidades emergentes y urgentes, los asociados en la ejecución también deben demostrar responsabilidad en la ejecución de las intervenciones. 
3. Pedimos que se invierta específicamente en una mejor atención médica, social, legal y psicológica para las sobrevivientes de violencia sexual. Esto requiere financiamiento a largo plazo para mejorar la capacitación médica, el suministro de kits para después de las agresiones sexuales a los centros de atención, el apoyo jurídico. Así como la provisión de refugios para las sobrevivientes. También se necesita financiamiento para actividades de sensibilización destinadas a prevenir la estigmatización o la marginación de las víctimas, que a veces les impide buscar ayuda. Dado el elevado número de solicitudes de aborto por parte de las sobrevivientes, en Médicos Sin Fronteras también pedimos que se adapte el marco legal nacional para garantizar el acceso a la atención integral del aborto con medicamentos. 

La violencia sexual es una grave emergencia médica y humanitaria en la República Democrática del Congo. Según la última información del Área de Responsabilidad de la Violencia de Género de la RDC1, que recopila datos de varias organizaciones humanitarias que brindan servicios de atención a la violencia de género, en 12 provincias de la RDC, en el segundo trimestre de 2024, recibieron atención médica 55,500 sobrevivientes de violencia sexual.  

1 République Démocratique du Congo: Bulletin d’information du GBV AoR Avril – Juin (T2) 2024 (Août 2024) – Democratic Republic of the Congo | ReliefWeb

Haz click aquí y consulta el informe ‘Pedimos ayuda’ violencia sexual en República democrártica del Congo (en inglés).