Carta abierta a Ylva Johansson, comisaria europea de Asuntos de Interior

MSF response to Moria Fire

Carta abierta de la Dra. Hilde Vochten, coordinadora médica del proyecto de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Lesbos, Grecia.

Comisaria de la UE, Ylva Johansson:
 
Nos dice que viene a Lesbos y Samos para prepararse para el próximo invierno, pero planea implementar las mismas políticas que solo han creado sufrimiento durante los últimos cinco años desde el acuerdo entre la Unión Europea-Turquía.
 
Este no es el primer invierno en el que hombres, mujeres, niños y niñas que buscan protección en Europa tienen que vivir en miserables tiendas de campaña en el frío y el barro de las islas griegas. Han pasado cinco inviernos devastadores desde que Europa empezó a atrapar personas en las islas. Cinco inviernos que han llevado a la indigencia, la traumatización e incluso la muerte de las personas atrapadas en centros de acogida financiados por la Unión Europea (UE).
 
Seamos claros: la situación actual de las islas griegas no se debe a la falta de preparación para el invierno. Sobre el terreno, nosotros y otros estamos aquí lidiando con las terribles consecuencias de la política de contención de la Unión Europea (UE) y hemos visto cómo se desarrolla esta crisis ante nuestros ojos. Hemos proporcionado evidencia de cómo afecta a las personas cuyo único deseo es la seguridad y la estabilidad, como usted y como cualquiera de nosotros. Si no está dispuesta a responsabilizarse a sí misma y a los gobiernos de la UE por este continuo daño y negligencia, estamos dispuestos a asumir este papel.
 
Desde 2017, nos enfrentamos a una emergencia de salud mental permanente en los campos de la isla. Entre nuestros pacientes hay niños y niñas que caen en la desesperación, dejan de hablar, comer y jugar, y recurren a la autolesión. ¿Sabía que solo el año pasado tratamos al menos a 50 niños y niñas que se autolesionaban o tenían pensamientos suicidas en Lesbos? En enero, tres más intentaron suicidarse. En 2020, nuestros psicólogos en Samos trataron a 254 nuevos pacientes, y la mitad de ellos mencionaron ideas suicidas o pensaron en la muerte durante su primera sesión. No son solo las duras condiciones las que tienen consecuencias perjudiciales para la salud mental de las personas; también es su política de contención, la falta de seguridad, el limbo continuo y el miedo a ser devueltos a lugares inseguros.
 
Durante los últimos cinco años, hemos tratado a cientos de sobrevivientes de violencia y tortura que, después de meses en los puntos críticos financiados por Europa, cayeron en la desesperación total. Varios siguen aquí, sin protección, compartiendo carpas con absolutos desconocidos, sufriendo dolores crónicos y recuerdos recurrentes de sus experiencias traumáticas actuales y anteriores, atrapados en un ciclo interminable de re-traumatización.
 
En Samos, MSF suministra agua potable a miles de personas que viven en el campo. ¿Puede creer que tenemos que suministrar agua potable a las personas en la UE, uno de los bloques de países más ricos del mundo?
 
Nada de esto es una consecuencia involuntaria ni un problema de falta de capacidad o recursos: se supone que las condiciones en las islas griegas son un impedimento para aquellos que todavía están pensando en intentar el viaje. Señora Johansson, esta no es la primera vez que busca dar un giro positivo a lo que es, en realidad, una situación desastrosa.
 
Después del incendio que destruyó Moria el pasado mes de septiembre, usted dijo “no más Morias” y, sin embargo, se están construyendo más campamentos. En varias ocasiones antes de eso, hemos escuchado a la UE hablar sobre el derecho a solicitar asilo y los procedimientos de asilo y retornos respetuosos. Incluso ha hablado de solidaridad entre los países europeos. Entonces, cuando hoy nos dice que viene con soluciones, perdónenos por no creer ni una palabra de lo que dice.
 
Ha venido a prometer mejores condiciones en los nuevos campos. Sin embargo, no  abordan la raíz del problema. Mientras la UE dé prioridad a contener y devolver a los migrantes en la frontera exterior de la UE sobre la protección y la acogida digna, quienes busquen seguridad en Europa seguirán sufriendo.
 
Señora Johansson, jugar con las palabras para maquillar la misma política dañina ya no es convincente. No puede volver a empaquetar las mismas ideas destructivas y decirnos que serán más humanas.
 
Lo hemos dicho antes: si realmente se compromete a resolver adecuadamente esta crisis y proteger las vidas y los derechos de las personas que huyen de sus países en busca de seguridad, es hora de pedir cuentas a los gobiernos europeos. Es hora de exigir alternativas dignas en los campos, permitir el acceso a un procedimiento de asilo justo y digno y garantizar una atención médica adecuada y adaptada a las necesidades de las personas que huyen de la violencia, los conflictos y el trauma.
 
Si insiste, en aras del compromiso político, en promover y replicar el mismo modelo que tanto daño y sufrimiento ha creado, su "No más Morias" serán sólo palabras y consignas vacías. Y se seguirán construyendo nuevas Morias una y otra vez.
 
Dra. Hilde Vochten
Coordinadora médica, Proyecto de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Lesbos.
Compartir