Declaración de MSF tras incidente en el puesto de control de Nguti, Camerún

El sábado 25 de diciembre, el centro de llamadas de emergencia de Médicos Sin Fronteras (MSF) recibió una llamada relacionada con una persona herida que necesitaba asistencia urgente en el área de salud de Tinto, Camerún. Una de nuestras cuatro ambulancias logró recoger al paciente a la mañana siguiente en el área de Ashum. Dada su grave condición, tuvo que ser transferido a Mutengene a través de Kumba para recibir atención quirúrgica.

El sábado 25 de diciembre, el centro de llamadas de emergencia de Médicos Sin Fronteras (MSF) recibió una llamada relacionada con una persona herida que necesitaba asistencia urgente en el área de salud de Tinto, Camerún. Una de nuestras cuatro ambulancias logró recoger al paciente a la mañana siguiente en el área de Ashum. Dada su grave condición, tuvo que ser transferido a Mutengene a través de Kumba para recibir atención quirúrgica.  

Como se acordó y se hace regularmente, MSF se había puesto en contacto con las autoridades militares locales de antemano, y les informó sobre el traslado de un paciente herido a Mutengene. Sin embargo, las fuerzas de seguridad camerunesas detuvieron la ambulancia en el puesto de control de Nguti y la obligaron a regresar a Mamfe, donde el paciente tuvo que ser tratado y estabilizado. 

Desde entonces, para evitar futuros incidentes con nuestras ambulancias, nos hemos puesto en contacto con las autoridades para comprender el motivo de la mala comunicación con esta referencia. 

Respecto a este incidente y las denuncias publicadas en algunos medios, MSF recuerda a todas las partes relevantes que: 

1. En nuestro trabajo en Camerún, y en otras partes del mundo, MSF trata a las personas basándose en sus necesidades médicas, independientemente de sus antecedentes o afiliaciones. Este trabajo médico humanitario imparcial y neutral está especialmente protegido por las Convenciones de Ginebra, que especifican que las personas que no participen activamente en las hostilidades, incluidos los miembros de las fuerzas armadas que han dejado a un lado las armas y las personas que quedan fuera de combate por enfermedad, heridas, detención o alguna otra causa, serán, en todas las circunstancias, tratadas humanamente sin ninguna distinción fundada en raza, color, religión o fe, sexo, nacimiento o riqueza o cualquier otro criterio similar. 

2. Impedir y obstruir nuestro trabajo pone en riesgo la vida de los pacientes. 

3. Las acusaciones de complicidad con cualquier actor en un conflicto ponen a los pacientes y al personal de MSF en grave e inmediato peligro. 

4. Hacemos un llamado a todas las personas a ser responsables en sus declaraciones y publicaciones relacionadas con nuestra acción humanitaria en el país. En un contexto ya muy sensible, la difusión de la información que daña nuestra reputación como organización humanitaria neutral, imparcial e independiente pone en peligro la vida de nuestros equipos y pacientes. 

MSF trabaja en Camerún desde 1984. En la actualidad, implementamos proyectos de atención médica en la Región del Extremo Norte, en la Región del Sudoeste y en Yaundé, apoyando el acceso a la atención médica en comunidades y hospitales, brindando atención quirúrgica, tratamiento contra la malaria, tratamiento para casos de COVID-19 y servicios de promoción de la salud.

En 2020, tratamos a más de un millón de pacientes en Camerún. En diciembre de 2020, las actividades de MSF fueron suspendidas por las autoridades en la Región del Noroeste y todavía estamos en dialogo con ellas para reiniciar nuestro apoyo médico. Actualmente, MSF ha enviado equipos médicos a los distritos sanitarios de Ekondo-Titi y Bakassi en la región suroeste de Camerún, donde se ha desatado una epidemia de cólera.