Día Mundial de la Tuberculosis

Urge resolver los problemas de calidad, precio y suministro de medicamentos para las formas resistentes de la enfermedad. Ahora que existe una nueva prueba de diagnóstico rápido para este tipo de tuberculosis, urgen acciones inmediatas para mejorar el acceso a los tratamientos que pueden curarla.

Urge resolver los problemas de calidad, precio y suministro de medicamentos para las formas resistentes de la enfermedad. Ahora que existe una nueva prueba de diagnóstico rápido para este tipo de tuberculosis, urgen acciones inmediatas para mejorar el acceso a los tratamientos que pueden curarla.

Según la Organización Mundial de la Salud, la tuberculosis resistente a los medicamentos (DR-TB por sus siglas en inglés) va en aumento con 440.000 nuevos casos anuales. De ellos, sólo el 7% recibe tratamiento y la enfermedad acaba con la vida de 150.000 personas cada año. Hasta ahora, uno de los problemas principales era la dificultad para detectar la DR-TB, que requería largas pruebas de laboratorio.

“Ahora que tenemos una nueva prueba que puede detectar la DR-TB en menos de dos horas en lugar de tres meses, más personas necesitarán un suministro fiable de medicamentos para curarse”, declara la Dra. Jennifer Hughes desde el proyecto de MSF en Khayelitsha, Suráfrica.

MSF va a utilizar la nueva prueba diagnóstica en 15 de sus proyectos de tuberculosis en el mundo. “Hemos desarrollado una forma de manejar la DR-TB dentro de la comunidad que puede ser ampliada, aumentando así el acceso al tratamiento en entornos de alta prevalencia de VIH. Con diagnósticos más rápidos y mejores modelos de tratamiento de la DR-TB, ahora tenemos que solventar las cuestiones de precio y suministro de los medicamentos para tratar esta forma de tuberculosis. También hace falta el desarrollo de nuevos medicamentos”, afirma la Dra. Hughes.

Ni la calidad ni el suministro de medicamentos están asegurados

El tratamiento de la DR-TB depende de antibióticos desarrollados hace mucho tiempo, muchos de los cuales tienen graves efectos secundarios, que van desde nauseas constantes a sordera, y que deben tomarse siguiendo regímenes complicados: los pacientes tienen que tomar hasta 17 píldoras cada día durante largos periodos de tiempo que pueden llegar hasta los dos años. Sin embargo, éstos son los únicos medicamentos que existen actualmente para tratar la DR-TB. El informe de MSFmuestra que estos medicamentos conllevan múltiples problemas de precio y de suministro que deben ser resueltos con urgencia.

“Los pacientes están atrapados en un círculo vicioso. No se diagnostican suficientes casos y los problemas de suministro de medicamentos, junto con los elevados precios de los mismos, impiden poner en tratamiento a un mayor número de personas”, afirma el Dr. Tido von Schoen-Angerer, director ejecutivo de la Campaña para el Acceso a Medicamentos Esenciales de MSF. “La baja demanda de medicamentos para tratar la DR-TB hace que el mercado no sea lo bastante atractivo para los productores, lo que empeora todavía más los problemas de aprovisionamiento y precio”.

Los autores del informe de MSF han examinado medicamentos utilizados para tratar la DR-TB según el número de proveedores, su calidad y su precio, basándose en informaciones obtenidas del Servicio Mundial de Medicamentos (Global Drug Facility) y de productores farmacéuticos. Los resultados obtenidos muestran que hay una sola fuente de calidad asegurada para el suministro de cuatro de los medicamentos recomendados. Depender de un único proveedor, cuya producción podría interrumpirse o trastocarse en cualquier momento siempre implica el riesgo que conlleva interrumpir un tratamiento para los pacientes. Por ejemplo, el abastecimiento de kanamicina inyectable se vio interrumpido en 2010, provocando rupturas de stock temporales a nivel mundial.

Altos precios por falta de competencia en el mercado

Además, el informe de MSF encontró que varios medicamentos para tratar la DR-TB son muy caros, con precios que para dos de los fármacos existentes han aumentado en más de un 600% y para uno incluso en más de un 800% en los últimos 10 años. Un régimen de tratamiento de la DR-TB de 24 meses de duración puede costar hasta 9.000 dólares americanos por paciente, 470 veces más que los 19 dólares americanos que cuesta la medicación estándar para tratar la TB sensible a los medicamentos.

Una forma de impulsar una mayor producción de algunos de estos medicamentos es que los financiadores garanticen por adelantado ciertos volúmenes de compra durante varios años a los productores. También se requieren otros mecanismos, como mejorar las previsiones de necesidades a largo plazo de medicamentos contra la DR-TB para ayudar a atraer a productores al mercado, garantizando una mayor seguridad de suministro y una mayor competencia que contribuya a reducir los precios.

“Necesitamos ver acciones inmediatas para resolver los problemas de suministro y mejorar el acceso a los medicamentos para la DR-TB, de modo que más gente pueda iniciar el tratamiento y se reduzca la transmisión de esta enfermedad”, añade la Dra. Hughes.

Lee el informe: DR-TB drugs under the microscope PDF (610kb, inglés)

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