Haití: Mientras las y los sobrevivientes del terremoto se recuperan, aún quedan muchas necesidades sanitarias

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Cuatro meses después de que un terremoto sacudiera el sur de Haití, el número de sobrevivientes que buscan atención por lesiones traumáticas es menor, pero muchas instalaciones sanitarias han resultado dañadas y las necesidades de salud desde hace mucho tiempo siguen siendo altas. Médicos Sin Fronteras (MSF) continúa atendiendo a las y los sobrevivientes mientras completan su recuperación y apoya la atención materna, pediátrica y neonatal en las zonas donde las instalaciones sanitarias se han visto afectadas.

Cuatro meses después de que un terremoto sacudiera el sur de Haití, el número de sobrevivientes que buscan atención por lesiones traumáticas es menor, pero muchas instalaciones sanitarias han resultado dañadas y las necesidades de salud desde hace mucho tiempo siguen siendo altas. Médicos Sin Fronteras (MSF) continúa atendiendo a las personas sobrevivientes mientras completan su recuperación, y apoya la atención materna, pediátrica y neonatal en las zonas donde las instalaciones sanitarias se han visto afectadas.
 
Según cifras oficiales, el terremoto dejó al menos 2,248 personas muertas, 12,763 heridas y 329 desaparecidas. Decenas de miles de casas resultaron dañadas o destruidas, igual que 97 instalaciones médicas y otras infraestructuras. En los últimos meses, Haití también ha sufrido una escasez de combustible y un aumento de la violencia y la inseguridad en la capital, Puerto Príncipe.
 
"La necesidad de reconstrucción en el sur no debe olvidarse en medio de las diversas crisis que afligen a Haití en este momento", asevera Nicholson Petit, gestor de incidencia de MSF para Haití. "Todavía hay grandes daños en las infraestructuras y las instalaciones sanitarias, y podemos ver los efectos acumulados de los desastres anteriores, como el huracán Matthew en 2016".
 
 
 
 
En el Hospital de la Inmaculada Concepción (HIC) en Les Cayes, MSF brindó atención quirúrgica y postoperatoria a 210 pacientes con traumatismos desde finales de agosto.
 
"Nuestros y nuestras pacientes provienen de todo el sur y han sido operados en Les Cayes, Jérémie, Tabarre o en otros lugares", dijo la Dra. Diana Galindo, coordinadora del proyecto de emergencia en Les Cayes. "La mayoría recibe atención ambulatoria para eliminar los fijadores externos y controlar las infecciones".
 
Otro de los principales centros médicos en Les Cayes, el Hospital OFATMA, resultó gravemente dañado por el terremoto. Como solución temporal, un equipo médico de MSF trabaja con el personal del hospital para brindar atención pediátrica y neonatal en tiendas de campaña. Desde principios de noviembre, trataron a 1,174 pacientes de forma ambulatoria y admitieron a 63 pacientes, a menudo por neumonía o diarrea grave. MSF también construyó y equipó una sala de partos y proporcionó tiendas de campaña para la atención pre y postparto.
 
Hasta noviembre, MSF gestionaba clínicas móviles en múltiples áreas afectadas por el terremoto. Los equipos de MSF atendieron a más de 11,500 pacientes en los departamentos de Sud, Nippes y Grand'Anse de Haití, tratando afecciones relacionadas con la pobreza y las difíciles condiciones de vida, como lesiones cutáneas, infecciones agudas de las vías respiratorias, diarrea y parásitos intestinales.
 
"Las personas tienen el mismo tipo de necesidades médicas que tenían antes del terremoto, mientras que sus condiciones de vida son cada vez más precarias dados los problemas económicos, políticos y de seguridad en el país, como la reciente escasez de combustible", dijo el Dr. Joseph Elysée Junior Nerisson, coordinador médico adjunto de MSF. "Se ha vuelto más difícil llegar a los centros de salud debido a que muchos resultaron dañados por el terremoto".
 
En Port-à-Piment, el hospital público donde MSF brinda atención de salud materna sufrió graves daños. MSF trasladó estos servicios de salud a otro edificio y ahora está trabajando en su mejora y ampliación para brindar atención obstétrica de emergencia a mujeres que sufren complicaciones durante el parto, así como atención neonatal. MSF también apoya varios centros de salud en los alrededores de Port-à-Piment mediante donaciones de suministros y medicamentos.
 
En el departamento de Nippes, los equipos de MSF respondieron a las necesidades médicas mediante clínicas móviles en áreas rurales y remotas de Baradères. A causa del difícil acceso al sistema sanitario, la mayoría de pacientes en Baradères llegaron con problemas de salud y lesiones no relacionadas con el terremoto, como dolor abdominal, gastritis, infecciones y fiebre.
 
"Pocos días después del terremoto, nos enteramos de que personas brindaban ayuda a las víctimas en otras áreas", dijo Cadet Rameau, de 69 años, de Fond Palmiste, Baradères. "Como las carreteras no son buenas, al final no vino nadie [más]. MSF es la primera institución que vino aquí para brindarnos atención gratuitamente y sin hacernos pagar los medicamentos. De lo contrario, tendríamos que ir al centro de la ciudad de Baradères. El transporte para llegar allí es caro y hay que pagar los servicios del hospital".
 
 
 
 
MSF también entregó 2,5 millones de litros de agua potable, reparó redes de agua y distribuyó material de refugio de emergencia y suministros de higiene a miles de personas en Baradères.
 
"Si bien hemos terminado nuestra respuesta de emergencia en Nippes, las personas siguen siendo vulnerables a futuros desastres", dijo Jean-Nicolas Armstrong Dangelser, jefe de misión de MSF. "Ahora es necesario realizar un esfuerzo a más largo plazo en la reconstrucción de las instalaciones sanitarias y las redes de agua, así como de los hogares de las personas".
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