Más de 10,000 personas se refugian en el Hospital General de Masisi y nuestras instalaciones por combates en Kivu Norte

La situación humanitaria y de seguridad en el territorio de Masisi, en Kivu Norte, República Democrática del Congo, sigue siendo muy inestable. Los combates en la ciudad de Masisi y sus alrededores, entre el M23/AFC y el ejército congoleño -apoyado por elementos aliados-, continuaron el jueves 8 de enero por la mañana. Miles de personas (habitantes, personal de Médicos Sin Fronteras y del Ministerio de Salud y sus familias) volvieron a acudir al Hospital General de Masisi y a la base de MSF en busca de refugio.   

“Es difícil estimar el número exacto, pero diría que más de 10,000 personas siguen refugiadas allí, la gran mayoría de ellas mujeres, niñas y niños”, afirma Romain Briey, coordinador del proyecto de MSF en Masisi.  

“Estamos empezando a tener algunas preocupaciones porque las instalaciones médicas no son suficientes para satisfacer las necesidades básicas de estas personas”, continúa Briey. “Las letrinas están empezando a desbordarse y estamos haciendo todo lo posible para responder a esta situación. Pero la grave falta de actores humanitarios en la zona está dificultando las cosas”.   

No es la primera vez que estas estructuras reciben una afluencia de personas desplazadas de tal magnitud. Estos desplazamientos son habituales en esta zona asolada por el conflicto desde hace años. La semana pasada, ya había gente buscando refugio en el hospital general de Masisi y en el centro de salud de referencia de Nyabiondo. Desde entonces, los equipos de MSF y del Ministerio de Salud se han movilizado para hacer frente a la afluencia de heridos. Entre el 2 de enero y la mañana del jueves 8, han sido atendidas 77 personas heridas.   

“Hoy, además de tratar a las personas heridas y seguir proporcionando cuidados regulares, los equipos intentan apoyar a las familias refugiadas en las estructuras. Están garantizando el acceso al agua potable y atención médica”, explica Romain Briey. “Pero pronto habrá necesidad de alimentos si la situación continúa”.   

La situación de seguridad en la zona también está afectando la capacidad que tenemos en MSF para derivar a pacientes en estado crítico a Goma y para desplegar equipos en otras partes del territorio. Esto hace imposible evaluar las necesidades en otras zonas del territorio. 

Dada la volatilidad de la situación y la magnitud de los combates, desde Médicos Sin Fronteras llamamos a todas las partes en el conflicto a que sigan garantizando la seguridad de los pacientes, los equipos y las personas refugiadas en las instalaciones médicas y humanitarias. 

“La seguridad de la población en el hospital no puede garantizarse si las partes beligerantes no respetan sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario”, aseveró el doctor Lucien Kandundao, director médico del Ministerio de Salud en la zona sanitaria de Masisi. “Afortunadamente, hasta ahora se ha garantizado este respeto y estamos trabajando a nuestro nivel para garantizar que también se respete plenamente la neutralidad del hospital y que no haya personas armadas o uniformadas en el interior del hospital”. 

Nuestros equipos apoyan al Ministerio de Salud en Masisi desde 2007. Actualmente, desde Médicos Sin Fronteras brindamos apoyo al Hospital General de Referencia, al Centro de Salud de Referencia de Nyabiondo y a varios centros de salud de la periferia.