Mordeduras de serpiente: se necesitan urgentemente antídotos accesibles en el África Subsahariana

Snakebite Amputation

El envenenamiento por mordedura de serpiente genera discapacidad de forma permanente a cientos de miles y mata a más de 100,000 personas cada año alrededor del mundo –más que cualquier otra enfermedad tropical desatendida designada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) – a pesar de la existencia de tratamientos efectivos.

El envenenamiento por mordedura de serpiente genera discapacidad de forma permanente a cientos de miles y mata a más de 100,000 personas cada año alrededor del mundo –más que cualquier otra enfermedad tropical desatendida designada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) – a pesar de la existencia de tratamientos efectivos. 
 
Tan sólo en el África Subsahariana, más de 20,000 personas mueren debido a las mordeduras de serpiente cada año. Médicos Sin Fronteras (MSF) atiende a miles de personas de forma totalmente gratuita en sus instalaciones todos los años, pero quienes sufren por las mordeduras de serpiente en esta región viven en áreas rurales y no son atendidos con antídotos (el único tratamiento validado para la enfermedad), o reciben otro tratamiento de menor calidad porque los exorbitantes precios dejan los tratamientos de calidad fuera del alcance de las personas.
 
Afortunadamente, en marzo de 2017 la OMS clasificó a la mordedura de serpiente como una Enfermedad Tropical Desatendida de la más alta prioridad. Este año la OMS lanzará un ambicioso plan para reducir las muertes y discapacidad provocadas por las mordeduras de serpiente. El plan buscará abordar la falta de acceso a antídotos efectivos y de calidad, y que es uno de los principales obstáculos con los que se encuentra MSF al momento de atender a personas en lugares como Sudán del Sur, República Centroafricana y Etiopía.
 
Los antídotos son medicamentos derivados del plasma de caballos que están “hiperinmunizados” con venenos de serpiente. A las personas mordidas por serpientes se les aplica el antídoto de forma intravenosa. La severidad de la mordedura determina la dosis administrada o el número de viales que necesita cada persona. 
 
 
Actualmente, en la mayoría de los países africanos las personas deben pagar por sí mismas el tratamiento. Esto hace que sea casi inaccesible en contextos rurales empobrecidos, y es ahí en donde viven la mayoría de las personas que corren mayor riesgo. Un antídoto efectivo y de calidad normalmente cuesta mucho más de lo que ganan las personas en todo un año. En casos severos que requieren varias dosis de antídoto, el precio de un tratamiento completo puede exceder los $200 USD. Debido a los elevados precios de los antídotos de calidad, las personas normalmente se ven orilladas a comprar productos más baratos de una calidad, seguridad y efectividad cuestionable, contribuyendo aún más a la elevada tasa de muertes y discapacitados a causa de esta enfermedad. 
 
 
Entonces, ¿qué se necesita para solucionar esta crisis? Es necesario un gran compromiso con el plan de la OMS a nivel regional, nacional y mundial para mejorar substancialmente el acceso y disponibilidad de antídotos efectivos y de calidad. Los antídotos deben estar disponibles para cualquier persona de forma totalmente gratuita, o a un precio muy bajo, para ayudar a todos los afectados por esta mortal enfermedad. Esto implicaría que:
 

1. Más personas tendrán acceso a un tratamiento que salva vidas

 
La proporción de víctimas de mordeduras de serpientes en África que tienen acceso a cualquier antídoto (incluido los tratamientos ineficaces) es muy baja. El alto precio de los antídotos hace que la mayoría de las personas mordidas opten por acudir a los curanderos tradicionales (más baratos) antes de ir al hospital, a pesar de que ninguno de los métodos tradicionales para tratar la mordedura de serpiente ha demostrado ser eficaz. Si los tratamientos de calidad estuvieran disponibles de forma gratuita o a un precio muy bajo, las personas tendrían más probabilidades de buscar atención efectiva antes.
 

2. Los antídotos de menor calidad saldrán gradualmente del mercado

 
El mercado africano ha estado dominado por algunos antídotos de baja calidad porque su precio unitario es más bajo que el de los antídotos efectivos. Si un antídoto de calidad es subsidiado por los estados miembros de la OMS y son lanzados a un bajo precio o brindados de forma gratuita a quienes lo necesitan, la producción de alternativas de menor calidad dejará de ser un negocio rentable.
 

3. Los antídotos serán vistos como el tratamiento preferido en el África Subsahariana

 
El uso de productos de baja calidad ha hecho que los trabajadores sanitarios y las comunidades duden en usar los antídotos como tratamiento, ya que se han reportado muchos casos de productos ineficaces. Un mejor acceso a opciones de tratamiento efectivas y de calidad es crucial para restaurar la creencia de las personas en que los antídotos son el mejor tratamiento para las mordeduras de serpiente. 
 

4. Las personas mordidas serán atendidas con la dosis adecuada

 
El número de viales necesarios para atender a una víctima de mordedura de serpiente depende de la cantidad de veneno y la potencia del antídoto utilizado. Es común que las personas no reciban la dosis recomendada de antídoto porque sólo podían pagar parte del tratamiento. Las personas necesitan las dosis adecuadas que pueden evitar la muerte y la discapacidad. 
 

5.  Aumentará el número de proveedores africanos de antídotos efectivos y de calidad

 
Aunque se cree que el número de casos de mordeduras de serpiente que requieren tratamiento es relativamente estable, el mercado africano de antídotos ha fluctuado con el tiempo. Varios proveedores de antídotos efectivos y de calidad han detenido su producción porque sus cuotas de mercado disminuyeron o se estancaron.
 
youtube://v/HnuDJc6PILM
 
Fav-Afrique, producido por Sanofi-Pasteur, es el último ejemplo de un producto muy necesario que ha sido descontinuado. Si se subsidiaria el suministro y la disponibilidad de antídotos eficientes y de calidad, asegurando así un precio económicamente viable para los productores, aumentaría la demanda por un tratamiento de calidad y efectivo. 
 
Actualmente, la OMS está evaluando una serie de antídotos existentes para su uso en el África subsahariana como primer paso para determinar qué es un antídoto efectivo y de calidad; e identificar cuáles de los antídotos disponibles en el mercado no son efectivos y deben eliminarse. Debido a que eliminar o reducir drásticamente los gastos de bolsillo de las víctimas de mordeduras de serpiente es vital para enfrentar esta crisis, el siguiente paso a seguir debe ser el desarrollo de un mecanismo de financiamiento internacional para la adquisición y suministro global de antídotos asequibles y de calidad asegurada.
 
Para salvar vidas, los países y los donantes deben actuar ahora y apoyar un mecanismo de financiación internacional de antídotos e incluir el tratamiento de mordeduras de serpientes en las políticas universales de coberturas de salud. Para asegurar una respuesta mundial a gran escala contra esta enfermedad, la OMS, los países y los donantes también deben comprometerse a:
 
  • Apoyar la investigación y desarrollo de nuevos y mejores antídotos y herramientas de diagnóstico. 
  • Mejorar la formación de los profesionales sanitarios y la sensibilización sobre los primeros auxilios y prevención de las mordeduras de serpiente
  • Recopilar la evidencia sobre las cifras reales y la distribución de los casos de mordeduras de serpiente en diferentes regiones
  • Intensificar el trabajo para controlar la calidad de los antídotos. 
 
Durante la reunión de la Cumbre Ejecutiva de la OMS este mes en Ginebra, los estados miembros debatirán un proyecto de resolución sobre las mordeduras de serpiente que será sometido a la aprobación de la Asamblea Mundial de la Salud en mayo. La resolución propuesta y el plan de la OMS representan una gran oportunidad. Es hora de que los gobiernos y los donantes aprovechen este impulso y ayuden a prevenir de una vez por todas las muertes y la discapacidad causadas innecesariamente por las mordeduras de serpiente.
 
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