Preguntas y respuestas sobre las consecuencias del aborto inseguro

Según la Organización Mundial de la Salud, cada año se realizan alrededor de 22 millones de abortos inseguros. Esto significa que son realizados por personas que carecen de las habilidades necesarias o en un entorno que carece de los mínimos estándares médicos. La OMS estima que 47,000 mujeres y niñas mueren cada año, y otras 5 millones sufren discapacidades debido al aborto inseguro. Sin embargo, el panorama completo de las consecuencias del aborto inseguro es desconocido porque muchas mujeres y niñas no pueden buscar atención médica posterior, y nadie sabe cuántas mueren.

Es la política de Médicos Sin Fronteras (MSF) proporcionar anticonceptivos y atención para el aborto seguro como parte de nuestra respuesta a las necesidades de salud de las mujeres y las niñas.

El tratamiento de las complicaciones relacionadas con el aborto y la terminación del embarazo para salvar a una mujer de una complicación que ponga en peligro la vida, son parte de todos los cuidados obstétricos de MSF.

La decisión sobre si se debe finalizar un embarazo a petición de la paciente en un proyecto específico, se toma con mucho cuidado, ya que la seguridad de los pacientes y el personal es nuestra primera preocupación.

Los anticonceptivos se ofrecen en todos los proyectos pertinentes y siempre que las consideraciones locales lo permitan.

El embarazo no deseado y el aborto inseguro contribuyen significativamente al deterioro de la salud y a la mortalidad de las niñas y las mujeres. El aborto inseguro es una de las principales causas de mortalidad materna en todo el mundo.

Las consecuencias del aborto inseguro son un problema médico. Hemos visto una y otra vez que muchas mujeres recurren a métodos de aborto inseguros cuando no hay acceso a la atención para un aborto seguro, a pesar de los considerables riesgos. Los abortos inseguros suelen provocar serios problemas de salud, e incluso la muerte.

Las donaciones hechas a MSF se dirigen hacia un fondo general para nuestros programas médicos en todo el mundo. Utilizamos las donaciones para ejecutar cientos de programas médicos, algunos de los cuales incluyen la provisión de atención de abortos seguros.

Con raras excepciones -un desastre natural en el que tenemos necesidades repentinas, inesperadas y sin precedentes, por ejemplo- no permitimos a los donantes restringir su financiación a ningún tipo particular de programa o procedimiento médico. MSF no ejecuta ningún programa específico de abortos; La necesidad de proporcionar el aborto o de tratar las complicaciones médicas del aborto inseguro, que a menudo ponen en riesgo la vida, son una realidad en todos los tipos de programas médicos y en una variedad de contextos.

MSF no tiene una posición política sobre el aborto. Vemos las consecuencias del aborto inseguro como un problema exclusivamente médico: los abortos inseguros causan sufrimiento y muerte, y contribuyen a la carga global de mala salud.

Nuestro objetivo es reducir el sufrimiento y la muerte en lugares afectados por conflictos y crisis. Si la vida de la madre está amenazada, el médico debe tomar una decisión con el paciente o su familia.

Si la vida de la madre no está inmediatamente en peligro, pero la mujer quiere terminar su embarazo por cualquier otra razón, MSF evalúa todos los factores relevantes y decide si podemos o no ofrecer atención para un aborto seguro. Esto puede ser una decisión difícil, porque hemos visto una y otra vez que en ausencia de un cuidado seguro del aborto, las mujeres buscarán terminar un embarazo no deseado por otros medios, y los abortos inseguros muy a menudo conducen a más sufrimiento e incluso la muerte. Sin embargo, la prestación de este servicio en algunos lugares puede presentar un riesgo para los pacientes y para el personal. Evaluamos los riesgos para nuestros pacientes y nuestro personal al tomar esta decisión. Las leyes, costumbres y percepciones pertinentes deben considerarse caso por caso.

La terminación del embarazo a petición de la paciente en los proyectos de MSF, se apoya hasta el final del primer trimestre. La terminación del embarazo en un periodo gestacional posterior puede considerarse en casos excepcionales.

Sí. Cuando una niña o una mujer se acerca a MSF con el miedo a estar embarazada, como resultado de relaciones sexuales forzadas, violencia sexual, fracaso de un anticonceptivo o cualquier otra razón, MSF evaluará si la anticoncepción de emergencia es una opción y la proporcionará si es la elección de el paciente.

MSF no fomenta el aborto en absoluto. La terminación del embarazo es una elección únicamente de la mujer o de la niña. MSF no contempla el aborto como un objetivo; El objetivo de MSF es prevenir las consecuencias del aborto inseguro. Todas las pruebas señala que las mujeres que deciden que no pueden continuar un embarazo, encontrarán una manera de terminarlo, incluso si esto pone en riesgo sus vidas. MSF tiene como objetivo reducir las consecuencias del aborto inseguro.

El personal de MSF tiene que entender y estar de acuerdo con la política de MSF para la salud reproductiva, incluida la política sobre el aborto. Sin embargo, es la elección personal de cada profesional médico realizar o no realizar un aborto. El personal médico que personalmente no desea realizar un aborto no está excluido de MSF -se asignan a puestos donde no es necesario que realicen un aborto.