Siria: respuesta humanitaria insuficiente

MSF Mobile Clinic in Juba, South Sudan

La situación humanitaria en Siria sigue empeorando mientras se incrementa la escalada bélica, que involucra y afecta asimismo a las estructuras médicas del país. Más de dos millones de personas se encuentran desplazadas y el acceso a buena parte del país sigue siendo extremadamente complicado debido a la inseguridad y los combates.

La situación humanitaria en Siria sigue empeorando mientras se incrementa la escalada bélica, que involucra y afecta asimismo a las estructuras médicas del país. Más de dos millones de personas se encuentran desplazadas y el acceso a buena parte del país sigue siendo extremadamente complicado debido a la inseguridad y los combates.

La situación humanitaria en Siria sigue empeorando mientras se incrementa la escalada bélica, que involucra y afecta asimismo a las estructuras médicas del país. Más de dos millones de personas se encuentran desplazadas y el acceso a buena parte del país sigue siendo extremadamente complicado debido a la inseguridad y los combates. El número de sirios que busca refugio en los países vecinos crece aún cuando la respuesta en Líbano e Irak hasta el momento no cubre las necesidades de los refugiados. La llegada del invierno está dificultando todavía más las condiciones de vida de los refugiados sirios y de la población que permanece en el país.

Médicos Sin Fronteras (MSF) trabaja en la actualidad en tres hospitales de campo en el norte de Siria. Desde junio, 10,000 pacientes han recibido atención médica, incluyendo heridos de guerra (por bala, metralla, fracturas abiertas o heridos en explosiones). Se han llevado a cabo alrededor de 900 intervenciones quirúrgicas. El flujo de admisiones en los hospitales no es constante y depende del movimiento continuo de la línea del frente y de la posibilidad de referir a los pacientes. MSF también está ofreciendo formación a personal sanitario sirio en la gestión de víctimas en masa, selección de enfermos y cuidados de emergencia. Determinadas estructuras de salud también reciben apoyo específico de la organización humanitaria como la puesta en marcha de una sala de emergencias y de un banco de sangre en la zona de Alepo.

Otras organizaciones médicas y profesionales sirios han establecido diferentes centros de salud para tratar a heridos en la zona norte del país, pero aún así el acceso general a servicios médicos continúa siendo muy limitado para la población, especialmente para aquellos que sufren enfermedades crónicas. Un número significativo de pacientes de MSF necesitan tratamiento por enfermedades crónicas, atención en el parto o traumas debido a accidentes. Es necesario fortalecer la ayuda para cubrir estas necesidades.

Población desplazada en Siria
El acceso a buena parte del país sigue siendo muy difícil lo que imposibilita acercar a la población desplazada de la ayuda humanitaria a gran escala que necesitan. MSF ha llevado a cabo distribuciones específicas y ha llevado agua a algunos campos de desplazados, pero gran parte de la población que ha dejado sus casas y pueblos no están viviendo en los campos, sino que están en movimiento constante.

MSF está tratando de distribuir mantas, harina y medicamentos a la población desplazada en el área de Deir Ezzor. Sin embargo, miles de personas en la ciudad siguen sin poder acceder a servicios de salud adecuados. Los combates incesantes imposibilitan que MSF entre en la población y evacue a enfermos y heridos.

Refugiados en países vecinos
Según estimaciones oficiales, más de medio millón de refugiados sirios están registrados o esperando ser registrados como refugiados en países vecinos, pero esta cifra puede ser mucho mayor. Aunque el acceso a los refugiados en Líbano e Irak ha mejorado, la asistencia humanitaria que se les provee dista mucho de ser la adecuada.

MSF lleva a cabo consultas médicas y realiza distribuciones de ayuda a los refugiados en los dos países. Las familias que llegan a Líbano se refugian en cualquier edificio que pueden encontrar. La población local les está ayudando pero sus propios recursos se están agotando mientras la crisis persiste y el número de refugiados sigue aumentando. El registro de refugiados es extremadamente lento y no se han dispuesto medios suficientes para que sus necesidades de alojamiento, básicas y de acceso a la salud sean analizadas.

En el campo de refugiados de Domeez, en Irak, el acceso al agua y a los servicios sanitarios es muy pobre. Las condiciones de vida de los refugiados, ya de por sí muy complicadas, se hacen más difíciles todavía con la llegada del invierno y de temperaturas por debajo de cero grados.

En Jordania, MSF visita regularmente los campos de refugiados para identificar a pacientes que necesitan operaciones quirúrgicas. Los pacientes llegan o son enviados al hospital de Amman donde pueden ser asistidos en operaciones ortopédicas, fisioterapia, apoyo psico-social y seguimiento post-operatorio. MSF también provee consultas médicas a refugiados sirios en el hospital de Amman.

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