Un proyecto sin precedentes para abordar la tuberculosis infantil infradiagnosticada

La tuberculosis (TB) en niños y niñas es un flagelo silencioso: un niño muere a causa de la tuberculosis cada tres minutos y más de la mitad de todos los menores con tuberculosis nunca son diagnosticados.

Aprovechando una serie de nuevas recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en Médicos Sin Fronteras (MSF) iniciamos un proyecto mundial con el objetivo de aumentar el número de menores diagnosticados con tuberculosis, así como mejorar su experiencia de tratamiento y prevenir nuevos casos.

Esta iniciativa sin precedentes llamada “TACTiC” para Probar, evitar y curar la tuberculosis infantil apoyará proyectos para implementar estas nuevas recomendaciones en más de una docena de países de África y Asia. Además, el proyecto pretende contribuir a la creación de conocimientos a través de varios estudios multinacionales sobre la validez y viabilidad de las recomendaciones, al tiempo que aboga por su implementación generalizada y el desarrollo de mejores herramientas para diagnosticar la tuberculosis infantil.

Tuberculosis en niños y niñas: datos escalofriantes

Lanzado a finales de 2023, el proyecto TACTiC se basa en una observación escalofriante: la mayoría de los niños y niñas con tuberculosis nunca son diagnosticados y el 96% de los menores que mueren a causa de la tuberculosis nunca recibieron el tratamiento adecuado.

Las razones del subdiagnóstico de la tuberculosis en niños y niñas son multifactoriales: el personal médico y los programas pueden mostrarse reacios a iniciar un tratamiento prolongado de la tuberculosis en niños sin una prueba que confirme el diagnóstico.

Desafortunadamente, los niños y niñas se enferman con niveles bajos de la bacteria que causa la tuberculosis, lo que significa que las pruebas actuales disponibles para diagnosticar la tuberculosis son incapaces de confirmar la presencia de la bacteria que causa la enfermedad. Además, las pruebas disponibles actualmente se han desarrollado para personas adultas y a menudo se basan en muestras como el esputo, que a la mayoría de los niños y niñas les resulta difícil expectorar.

A estas barreras se añade la falta de recursos humanos para detectar y diagnosticar la tuberculosis en muchos centros de atención médica básica, así como la falta de acceso a herramientas de diagnóstico como radiografías y pruebas moleculares. Los retrasos en el diagnóstico de la tuberculosis infantil son comunes y, como los niños y niñas corren mayor riesgo de desarrollar las formas más graves de tuberculosis, estos retrasos suelen ser mortales.

Aumentar el diagnóstico de tuberculosis infantil

“Las recientes recomendaciones de la OMS sobre el diagnóstico de tuberculosis infantil pueden suponer un punto de inflexión para aumentar el número de niños y niñas diagnosticados y con el tratamiento correcto”, afirma Cathy Hewison, responsable del grupo de trabajo sobre tuberculosis de MSF. “Brindan al personal médico y a los programas de tuberculosis la confianza para tomar la decisión de tratar la tuberculosis en niños y niñas utilizando signos y síntomas clínicos sin depender de los resultados de las pruebas de laboratorio o de las radiografías si no están disponibles o cuando los resultados de las pruebas son negativos”.

“La implementación de estos sencillos algoritmos de decisión de tratamiento pueden ayudar al personal médico y a los programas nacionales de tuberculosis a diagnosticar y tratar a más menores. Nuestras experiencias iniciales en proyectos piloto han demostrado que el número de niños y niñas diagnosticadas con tuberculosis puede quintuplicarse con la introducción de estas nuevas recomendaciones. Sin embargo, las nuevas recomendaciones aún no se ponen en práctica de forma generalizada, por lo que queda mucho trabajo por hacer”, afirma Hewison.

El proyecto TACTiC tiene como objetivo ayudar a los proyectos y equipos de MSF, particularmente aquellos no especializados en el manejo de la tuberculosis, a iniciar la implementación de las nuevas recomendaciones de la OMS y utilizar su experiencia para fomentar una mayor ampliación dentro y fuera de MSF.

“Por supuesto, sería preferible disponer de pruebas de diagnóstico sencillas, fiables, económicas y de fácil acceso para detectar la tuberculosis infantil“, afirma Hewison. “Sin embargo, hasta la fecha no existen. Por lo que también abogamos por un aumento masivo de recursos para la investigación y el desarrollo de pruebas nuevas y adaptadas para diagnosticar la tuberculosis en niños y niñas”.

Más allá del diagnóstico: un enfoque centrado en el paciente

TACTiC no se trata sólo de mejorar el diagnóstico de la tuberculosis en niños y niñas, sino también del tratamiento y la prevención de la tuberculosis en este grupo de edad vulnerable. 

La OMS ha recomendado un enfoque centrado en el paciente para el tratamiento de la tuberculosis infantil. Basadas en un sistema de puntos a partir de la evaluación de los síntomas del menor. Las nuevas recomendaciones permiten la detección temprana de la enfermedad y el rápido inicio del tratamiento. A partir de una determinada puntuación umbral obtenida sumando los puntos, se recomienda iniciar un tratamiento adecuado contra la tuberculosis. Para los pacientes con formas no graves, este puede ser un tratamiento de cuatro meses recomendado recientemente, utilizando las mismas formulas aptas para niños que ya están ampliamente disponibles.

Los beneficios para los niños y las familias de un tratamiento dos meses más corto pueden suponer un enorme alivio. Al reducir los costos de viaje y el tiempo de seguimiento, además de mejorar la experiencia del tratamiento para el paciente pediátrico.

Los niños y niñas menores de cinco años que conviven cerca de adultos con tuberculosis suelen estar infectados y corren un alto riesgo de desarrollar la enfermedad de tuberculosis activa. A pesar de que mejorar el acceso al tratamiento preventivo de la tuberculosis (TPT) es un objetivo mundial desde hace tiempo, solo uno de cada dos contactos de tuberculosis menores de cinco años tiene acceso a él. La OMS ahora ha facilitado la protección de los niños y niñas en estas circunstancias para que no enfermen. Recomendando tratamientos cortos de tres meses para la prevención en este grupo vulnerable. TACTiC también pretende aumentar el conocimiento y el acceso a estos tratamientos.