Proyectos en el mundo

Nigeria

La madre de Khadija alimenta a su hijo con leche a través de una sonda nasogástrica. Khadija Jafar, de 2 años, es una de los muchos niños que reciben tratamiento por desnutrición en el Centro de Alimentación Terapéutica para Pacientes Internados (ITFC, por sus siglas en inglés) apoyado por MSF en el Hospital de Ganjuwa, en el estado de Bauchi, Nigeria. © Miguel Godonou/MSF

En Nigeria, Médicos Sin Fronteras (MSF) intensificamos nuestras actividades para abordar la crisis de desnutrición y ayudar a las personas desplazadas por la violencia. También dirigimos programas para mejorar la salud materno infantil.

 

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Cifras médicas importantes:

  • 1.203,600 consultas ambulatorias
  • 409,600 casos de malaria tratados
  • 193,900 niñas y niños hospitalizados en programas de alimentación ambulatoria
  • 154,600 personas hospitalizadas
  • 52,500 niñas y niños hospitalizados en programas de alimentación hospitalaria
  • 30,200 nacimientos asistidos
  • 16,400 pacientes tratados por sarampión
  • 14,400 consultas individuales de salud mental

En los últimos años, los conflictos, los fenómenos meteorológicos extremos y el deterioro de la situación económica han afectado las zonas noroeste, noreste y centro-norte de Nigeria, cuya crisis humanitaria es cada vez más profunda. Millones de personas viven en situaciones cada vez más vulnerables por sufrir niveles catastróficos de desnutrición y brotes de enfermedades prevenibles.

La violencia generalizada y los disturbios han obligado a más de 3,3 millones de personas a abandonar sus hogares 1. Estas, y muchas otras personas en esas zonas de Nigeria, tienen un acceso extremadamente limitado a los servicios médicos debido a la falta de centros sanitarios en funcionamiento y a los problemas económicos y de seguridad que implica desplazarse a los centros que todavía funcionan.

Violencia y desplazamientos

La región noroeste de Nigeria ha sufrido un aumento significativo de los niveles de violencia e inseguridad en los últimos años. Cientos de personas fueron asesinadas y secuestradas, y más de 600.000 personas han sido desplazadas2. En el noreste, miles de civiles fueron víctimas de los combates entre grupos armados de la oposición y las fuerzas armadas nigerianas. Esta violencia continua impide que las personas que necesitan asistencia médica busquen atención, ya que temen ser asesinadas o secuestradas en el viaje a los centros de salud.

Los equipos de MSF apoyan a las comunidades desplazadas y de acogida afectadas por la violencia en las zonas noroeste, noreste y centro-norte, incluido el estado de Plateau, donde la situación empeoró rápidamente en 2023 y dejó un saldo de cientos de muertes y desplazamientos masivos.

En el estado de Borno, pusimos en marcha un nuevo proyecto en colaboración con una fundación local para brindar atención médica básica a nivel comunitario en zonas de difícil acceso fuera de la ciudad de Maiduguri.

En el estado de Zamfara, nuestros equipos tuvieron que retirar en septiembre el apoyo a un centro de nutrición para pacientes hospitalizados en la ciudad de Anka debido al aumento de las tensiones en la zona y tuvieron que evacuar temporalmente a parte de nuestro personal en Zurmi en diciembre debido a los intensos combates cerca del hospital.

 

Jóvenes de la comunidad  de Oban en Nigeria, utilizan sacos de arena y maderas para arreglar temporalmente la carretera y que los automovilistas puedan pasar.
Vista lateral de un puente roto en la comunidad de Oban, en el área de gobierno local de Akamkpa, en el estado de Cross River. Nigeria 2023. © MSF

Brotes de enfermedades

En 2023, respondimos ante un brote de difteria sin precedentes que comenzó en el estado de Kano y se extendió por todo el país. A fin de año, se habían registrado más de 20,000 casos sospechosos y 600 muertes. Los equipos de MSF trataron a pacientes en Kano, Maiduguri y Bauchi.

Nuestros equipos también atendieron a una alarmante cantidad de pacientes con sarampión, en particular en Maiduguri, y respondieron ante brotes de otras enfermedades, como meningitis, cólera y fiebre de Lassa, en Ebonyi, Bauchi y Zamfara. Además, realizamos actividades de prevención contra la incidencia anual de la malaria y exigimos que se realizaran campañas de vacunación masiva en todo el país para contener la propagación de enfermedades prevenibles.

 

Desnutrición

La escalada de violencia y el alto nivel de pobreza, exacerbados por el aumento de la competencia por los recursos, cada vez más escasos como consecuencia del cambio climático, dejaron a muchas personas expuestas a ciclos crónicos de desnutrición aguda. En 2023, nuestros equipos siguieron enfocándose en actividades de nutrición y trabajando en 32 centros de alimentación terapéutica ambulatoria y en 10 centros para pacientes hospitalizados en 5 estados del noroeste (Zamfara, Sokoto, Katsina, Kano y Kebbi). También aumentamos nuestra respuesta en el noreste, triplicando nuestra capacidad de camas en Maiduguri tras el aumento de casos y duplicándola en el hospital de Kafin Madaki, en el estado de Bauchi.

Como la cantidad de casos de desnutrición seguía aumentando, intensificamos nuestra labor de incidencia política y exigimos que el gobierno y otras ONG aumentaran la ayuda a las personas afectadas, en especial en el noroeste, donde la crisis sigue siendo en gran medida no reconocida.

 

Salud de la mujer y violencia sexual

Nigeria tiene una de las peores tasas de mortalidad materna del mundo. Después de Sudán del Sur y Chad, es el país que tiene la mayor cantidad de muertes durante el parto, con más de 1,000 por cada 100,000 nacimientos 3. La falta de financiación y de acceso a servicios sanitarios, la alta tasa de inflación que dificulta el pago de las tarifas hospitalarias o el transporte y las prácticas culturales que impiden que las mujeres busquen atención médica son causas de este increíble récord y del alto porcentaje de mujeres que desarrolla complicaciones obstétricas.

En 2023, abrimos una clínica de salud para la mujer para madres de niños con desnutrición hospitalizados en el centro de alimentación terapéutica  que apoyamos en Katsina. También llevamos a cabo actividades obstétricas y neonatales, incluidas intervenciones quirúrgicas de enfermedades como la fístula obstétrica, en el hospital general de Jahun, en el estado de Jigawa.

En el estado de Kano, nuestros equipos apoyan a dos centros de atención médica general y a una clínica de salud materno-infantil, mientras que en Cross River proporcionamos atención obstétrica y neonatal de emergencia. También brindamos apoyo a cuatro centros de atención obstétrica y neonatal básica de emergencia en el noreste de Nigeria.

 

Habiba (2 años y 6 meses) tuvo fiebre hace cinco semanas y fue llevada por su madre, Hadiza, al centro de MSF.  Nigeria 2023.
Habiba de 2 años y 6 meses,  tuvo fiebre hace cinco semanas y fue llevada por su madre, Hadiza, al centro de MSF. Nigeria 2023. © Abba Adamu Musa/MSF

 

En Benue, miles de personas desplazadas, que huyeron de los enfrentamientos armados entre agricultores y pastores, viven en condiciones precarias. Nuestros equipos que trabajan en los lugares de desplazamiento siguen siendo testigos de índices extremadamente altos de violencia sexual o de género.

En 2023, ofrecimos una serie de servicios en Benue, como atención de la salud sexual y reproductiva y atención integral a víctimas y supervivientes de violencia sexual o de género, que incluía tratamiento y apoyo a la salud mental y actividades de promoción de la salud. Estos servicios también están disponibles en las ciudades de Shinkafi, Zurmi y Anka, en Zamfara.

 

Noma

Desde 2014, brindamos apoyo al Hospital Infantil de Noma, en Sokoto, en el noroeste de Nigeria, donde prestamos servicios de cirugía reconstructiva, nutrición y apoyo a la salud mental y realizamos actividades externas, con foco en la detección precoz. La mayoría de los pacientes que contraen noma (una infección desfigurante y mortal si no se trata a tiempo) son niños menores de seis años cuyo sistema inmunitario está debilitado por la desnutrición.

MSF apoyamos al gobierno para redactar el Plan Nacional de Control de Noma, cuyo objetivo es fomentar la concienciación sobre la enfermedad. En diciembre, tras muchos esfuerzos de incidencia política por parte de nuestros equipos, el noma se incluyó en la lista de enfermedades tropicales desatendidas de la Organización Mundial de la Salud. La inclusión de esta enfermedad es un hito importante, ya que aumentará la concienciación de la enfermedad a nivel mundial, promoverá la investigación y la financiación e impulsará los esfuerzos para controlarla.

 

Nº de profesionales* en 2023: 3,058 | Gasto: 74,4 millones € | MSF trabajamos por primera vez en este país en: 1996 | msf.org/nigeria | @MSF_WestAfrica

* La cifra de personal equivale al total de puestos a tiempo completo o FTE (del inglés full-time equivalent). Por ejemplo, dos personas a media jornada equivalen a un FTE.

 

Importante: Este artículo ofrece una visión general de nuestro trabajo en este país entre enero y diciembre de 2023; es un resumen que no puede considerarse exhaustivo.

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