Balcanes: Los niños sufren repetidos abusos por las autoridades fronterizas

En un nuevo informe titulado “Games of Violence” (Juegos de violencia), Médicos Sin Fronteras (MSF) expone la violencia que sigue perpetrándose en contra de los niños y los jóvenes por parte de las autoridades fronterizas de los Estados miembros de la Unión Europea y por la policía en las fronteras de Serbia con Hungría, Bulgaria y Croacia.

En un nuevo informe titulado “Games of Violence” (Juegos de violencia), Médicos Sin Fronteras (MSF) expone la violencia que sigue perpetrándose en contra de los niños y los jóvenes por parte de las autoridades fronterizas de los Estados miembros de la Unión Europea y por la policía en las fronteras de Serbia con Hungría, Bulgaria y Croacia. El reporte utiliza datos médicos y de salud mental, además de testimonios de nuestros jóvenes pacientes, para describir la violencia a la que se enfrentan.
 
“Para los niños y jóvenes que hoy están intentando huir de Serbia, la violencia es una constante y es perpetrada en su mayor parte por la policía fronteriza de los Estados miembros de la Unión Europea,” dice Stephane Moissaing, jefe de misión de MSF en Serbia. “Durante más de un año, nuestros médicos y enfermeras han escuchado la misma historia que se repite constantemente: jóvenes que son golpeados, humillados y atacados con perros durante su intento desesperado por seguir con sus trayectos.”
 
En los primeros seis meses de 2017, 92% de los niños y adolescentes que asistieron a las clínicas de salud mental de MSF y reportaron haber experimentado violencia física, señalaron a las policías de los estados miembros de la Unión Europea o a las autoridades fronterizas –de Bulgaria, Hungría y Croacia– como los perpetradores. Casi la mitad de estos niños (48%) señalaron a las autoridades de Bulgaria. 
 
De enero a junio de 2017, los equipos médicos de MSF que trabajan en clínicas móviles en Belgrado documentaron 62 incidentes de violencia intencional en la frontera con Hungría, y 24 en la frontera con Croacia. La gran mayoría de estos casos siguen el mismo patrón de golpizas, mordidas de perro y uso de gas irritante que los equipos de MSF han escuchado durante los últimos dos años de una violencia aparentemente sistemática contra las personas que intentan cruzar hacia la Unión Europea. 
 
“Es vergonzoso que los estados miembros de la Unión Europea estén usando intencionalmente la violencia para disuadir a los niños y jóvenes de buscar asilo en la Unión Europea,” dice Moissaing. “No está evitando que estos niños sigan intentándolo, pero les está causando un gran daño tanto físico como psicológico, los está haciendo más vulnerables y los está empujando de regreso a las manos de los traficantes contra los que la Unión Europea y sus estados miembros dicen estar luchando”.
 
MSF trabaja para atender a refugiados, solicitantes de asilo y migrantes en Serbia desde finales de 2014, y proporciona atención médica y en salud mental, refugio y servicios de agua y saneamiento en los puntos de entrada y salida del país. Desde enero de 2016 MSF trabaja en Belgrado, la capital de Serbia, brindando atención médica y en salud mental a quienes están varados en asentamientos informales dentro de la ciudad. En 2017 MSF abrió una clínica en el centro de la ciudad, y actualmente sigue abogando por el acceso a la atención médica, refugio y protección de la población vulnerable de hombres, mujeres y niños varados en Serbia. 
 
Puedes leer o descargar el informe [en inglés] aquí.
Compartir