Sudán

Mustafa y su hijo Yousif son pacientes de la comunidad de acogida. Tras notar que su hijo estaba enfermo, con dificultades respiratorias, fiebre e hinchazón, Mustafa lo llevó al hospital de MSF, donde Yousif fue ingresado en la sala de pediatría. Gedaref, Sudán. © Timothée Bouvet/MSF

Tras el estallido de una brutal guerra en Sudán en 2023, y a pesar de los desafíos administrativos y de seguridad, Médicos Sin Fronteras (MSF) adaptamos rápidamente nuestras actividades para dar respuesta.

 

Mapa de actividades de MSF en Sudán.

 

Cifras médicas importantes:

  • 697,600 consultas ambulatorias
  • 5,240 niños y niñas ingresados en programas de alimentación hospitalaria
  • 7,300 nacimientos asistidos
  • 620 recién nacidos hospitalizados
  • 4,610 intervenciones quirúrgicas
  • 102,300 hospitalizaciones en sala de emergencias

El 15 de abril de 2023, comenzaron intensos e inesperados combates entre las Fuerzas Armadas Sudanesas (FAS) y las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) paramilitares en Jartum, capital de Sudán. Esto provocó un caos y la extensión de la violencia por todo el país, que, a su vez, dejó un saldo de decenas de miles de muertes y millones de personas sin hogar.

Desde 2019, tras la destitución del expresidente Omar Al Bashir, nuestros equipos han ampliado las actividades médicas en todo Sudán en medio de una transición volátil y trabajando en 11 estados. En el país, ya había una gran cantidad de personas desplazadas y de refugiadas de los países vecinos. Cuando comenzó la guerra, reorientamos nuestra respuesta para intentar cubrir las necesidades de las personas afectadas.

El hospital del Sur de El Fasher, en Darfur Norte, al cual prestamos apoyo, recibió 136 pacientes personas heridas en las primeras 48 horas de los combates. Los pacientes tenían que ser atendidos en el suelo y en los pasillos debido a la falta de espacio, en lo que originalmente era solo un pequeño centro de maternidad sin capacidad quirúrgica. En las semanas siguientes, lo transformamos en un hospital con quirófano y sala de emergencias, con capacidad para responder ante incidentes con múltiples víctimas.

 

Fatoum Abdelkarim, de la ciudad de Nyala, en su séptimo mes de embarazo. En el Hospital Universitario de Nyala, en Sudán, recibe atención médica periódica y gratuita.
Fatoum Abdelkarim, de la ciudad de Nyala, en su séptimo mes de embarazo. En el Hospital Universitario de Nyala, en Sudán, recibe atención médica periódica y gratuita. © Abdoalsalam Abdallah/MSF

 

En Jartum, donde comenzó la guerra, hubo violentos combates callejeros, bombardeos y ataques aéreos. Las personas que pudieron huir de la ciudad lo hicieron, pero muchas otras quedaron atrapadas en sus hogares debido a la intensidad de los combates. La mayoría de los hospitales de la ciudad dejaron de funcionar de inmediato y las instalaciones que pudieron permanecer abiertas se desbordaron rápidamente.

Nuestros equipos que se encontraban en la ciudad aprovechaban las pausas entre combates para donar suministros médicos a hospitales y evaluar a otros que podíamos ayudar. A principios de mayo, habíamos llevado un equipo quirúrgico completo al hospital universitario de Bashair. En junio, ya pudimos funcionar totalmente en el hospital turco, originalmente un pequeño centro de maternidad y pediatría sin capacidad quirúrgica que convertimos en un centro sanitario que puede responder ante incidentes con múltiples víctimas.

Ese mismo mes, comenzamos a brindar apoyo al hospital Al Nao, en Omdurman, y tratamos a pacientes con heridas de disparos, puñaladas y metralla de explosiones, y también a pacientes con enfermedades no relacionadas con traumatismos. En julio y agosto, nuestros equipos comenzaron a trabajar en las salas de pediatría y maternidad del hospital Umdawwanban, en el estado de Jartum, y en el hospital Alban Al Jadeed, el único hospital público que sigue funcionando en el este del estado de Jartum.

En junio, también iniciamos actividades en el estado de Nilo Blanco. Nuestros equipos que trabajan en algunos de los superpoblados campamentos de refugiados y desplazados se desbordaron por los casos diarios de sospecha de sarampión y desnutrición infantil.

 

Vista del área de urgencias de la clínica de MSF en el campamento de Zamzam, en Darfur Norte, Sudán.
Vista del área de urgencias de la clínica de MSF en el campamento de Zamzam, en Darfur Norte, Sudán. Agosto 2024. © Mohammed Jamal

 

La vasta región de Darfur volvió a ser, como a principios y mediados de los años 2000, un epicentro de violencia. Aunque en Darfur Norte hubo una calma relativa después de varias semanas de intensos combates, en Nyala, en Darfur Sur, un recinto y depósito de MSF fueron atacados y saqueados al principio del conflicto. Por eso, tuvimos que suspender todas nuestras actividades en la ciudad y en los alrededores.

En Darfur Oeste, el hospital universitario El Geneina, al que también brindamos apoyo, también fue saqueado y gravemente dañado en los actos de violencia. La ciudad se volvió tan peligrosa que durante muchos meses no fue posible acceder a ella. Dos grandes masacres ocurrieron en Darfur Oeste a lo largo del año. Se estima que los actos de violencia étnica dejaron un saldo de 10,000 a 15,000 muertes en El Geneina.

A medida que se intensificaron los combates en todo el país, el saqueo de centros sanitarios y los ataques a personal e instalaciones sanitarios se convirtieron en una marca distintiva del conflicto y la Organización Mundial de la Salud documentó un total de 63 incidentes en el año. Muchos de esos incidentes ocurrieron en centros e instalaciones de MSF.

Aunque trabajamos mucho para ampliar nuestra respuesta en Sudán, nos enfrentamos a innumerables obstáculos. Las visas para nuestros experimentados equipos de emergencia se retrasaron muchas veces. En septiembre, las autoridades sudanesas implementaron una prohibición al transporte de suministros médicos y quirúrgicos a Jartum, con la intención de impedir que los soldados heridos de las FAR recibieran tratamiento de salvamento. También prohibieron que el personal humanitario viajara a las zonas controladas por las FAR. Estas limitaciones provocaron la retirada de nuestro equipo quirúrgico del hospital universitario de Bashair.

A pesar de estos desafíos, continuamos brindando asistencia médica en Rokero, en la zona montañosa de Jebel Marra, y en Kreinik. También seguimos realizando actividades médicas a lo largo del año en varios estados del este de Sudán, incluido Blue Nile, donde tratamos la desnutrición y apoyamos clínicas móviles en Ad-Damazin y en los alrededores.

 

Personal de MSF brinda atención a paciente en el centro de tratamiento del cólera de MSF, situado en Kassala, Sudán.
El centro de tratamiento del cólera de MSF, situado en Kassala, está ubicado en tiendas de campaña y brinda atención urgente a pacientes de cólera. Sudán 2023. © Mohammed Elhassan

 

En diciembre, las RSF habían tomado el control de todas las ciudades importantes de Darfur, excepto El Fasher, donde el Hospital del Sur se había convertido en el principal centro de derivación para todos los estados de Darfur. Para entonces, también habíamos restablecido nuestro apoyo al Hospital Universitario El Geneina.

Al principio de la guerra, cientos de miles de personas habían huido hacia el sur, a Wad Madani, en el estado de Al Jazirah, en busca de refugio de los combates en Jartum. Entre mayo y noviembre, nuestros equipos brindaron consultas médicas en centros sanitarios existentes y mediante clínicas móviles, y al menos el 40% de las consultas fueron pediátricas. Sin embargo, en diciembre, las FAR tomaron el control del Estado y se calcula que aproximadamente 500,000 personas fueron desplazadas al huir de la violencia. En un esfuerzo por cubrir las necesidades de las poblaciones, ampliamos nuestras intervenciones en los estados de Al Gedaref y Kassala.

A finales de 2023, había cerca de 6 millones de personas desplazadas en Sudán y 1,4 millones de personas refugiadas en los países vecinos, y además el sistema sanitario estaba al borde del colapso. Hasta la fecha, no se ha logrado un cese de fuego sostenido y los combates continúan.

 

Nº de personal* en 2023: 1,239 | Gasto: 71,4 millones € | MSF trabajamos por primera vez en Sudán en: 1978 | msf.org/sudan

* La cifra de personal equivale al total de puestos a tiempo completo o FTE (del inglés full-time equivalent). Por ejemplo, dos personas a media jornada equivalen a un FTE.

 

Este artículo ofrece una visión general de nuestro trabajo en este país entre enero y diciembre de 2023; es un resumen que no puede considerarse exhaustivo.